Ya esta el cachorro en su nuevo hogar, ahora es todo alegría, felicidad y juegos con él. Pero no debemos olvidar que hay que mantener a nuestro cachorro limpio y sano, para ello hay que seguir unas pautas de higiene.
Hay que tener en cuenta que la primera experiencia de aseo del cachorrito en su nuevo hogar tiene que ser lo mas placentera posible para el pequeño.
Por ello es recomendable no dejar pasar muchos días hasta empezar a tener contacto con los hábitos del cepillado.
Dependiendo del pelaje del cachorro es conveniente tener unos mínimos artículos básicos para el cuidado del pequeño, como cepillo, peine, cuchilla, tijeras, cortauñas, pinzas, champú, lociones, toallas, etc.
Todos estos artículos tienen que tener un sitio para poder guardarlos y tenerlos limpios y a mano para cuando los necesitemos.
El manejo del cachorro debe de ser con suavidad pero con firmeza.
Para asegurarnos que en el futuro sea una tarea fácil hay que ir acostumbrando al pequeñín a manipularlo, tocarle y acariciar todas las partes del cuerpo para que en el futuro no oponga resistencia.
Por eso recomiendo que le enseñemos a tumbarse sobre ambos lados, apoyándose la espalda, a manipularle las pezuñas, etc.
Esto sera muy útil para cuando crezca nuestro cachorro.
Otro consejo antes de que llegue el día del primer baño es ir acostumbrándolo al ruido y la sensación de aire caliente del secador, esto es una de las cosas que mas altera al perro. Es importante que se acostumbre a esto, ya que necesitaremos secar perfectamente al cachorro para evitar que se enfríe después del baño y así pueda enfermar.
Es conveniente no realizar el primer baño hasta tener todo el calendario de vacunación al día, hasta entonces hay en el mercado champús en espuma para realizar baños en seco.
Estos champús como he comentado son ideales para cachorros, perros enfermos o madres gestantes.
Llego el momento del baño.
Como comentaba en lineas anteriores es importantísimo que nuestro cachorro no se enfríe en el proceso del baño, para ello tendremos la habitación o cuarto de baño a una temperatura cálida y sin corriente de aire. La temperatura del agua tiene que estar equilibrada o un poquito mas alta a la temperatura del cachorro, entre 37 y 39 grados, nunca fría.
Otra de las cosas aconsejables es que la superficie donde bañemos al perro no resbale para evitar que se asuste, la base deberá ser antideslizante o poner una toalla en la base para evitar los resbalones.